Todos los años, y a menudo todos los trimestres, un gran número de empresas que cotizan en bolsa, sobre todo en Estados Unidos, publican sus previsiones empresariales. No tienen ninguna obligación de hacerlo, y siempre ha sido un tema de debate entre los expertos, pero muchos creen que proporcionar a los inversores información y orientaciones sobre los resultados financieros es simplemente un buen negocio.
La práctica de publicar estimaciones de resultados existe desde hace muchos años, y los estudios demuestran que aumenta el seguimiento de los analistas y puede evitar sobresaltos inesperados en los resultados. Esto, a su vez, podría reducir la volatilidad del precio de las acciones y el peligro y las implicaciones de los litigios entre accionistas. La publicación de tales proyecciones no garantiza su exactitud, y para evitar la posibilidad de demandas judiciales, las empresas tienen que incluir cláusulas de exención de responsabilidad en sus informes de orientación.
Siga leyendo para comprender mejor el concepto de orientación empresarial y decidir por sí mismo si formará parte de su futura estrategia de investigación.
¿Qué es la orientación de una empresa?
Normalmente, las estimaciones de una empresa se emiten poco después de la publicación de su informe trimestral de resultados más reciente. La información que contiene suele revisarse en detalle en una reunión entre analistas del sector y directivos de la empresa antes de darse a conocer a los accionistas y al público a través de los informes periódicos de la empresa, comunicados de prensa y convocatorias de resultados.
Dependiendo de las preferencias de la empresa, las estimaciones de ventas, las circunstancias del mercado y los gastos previstos de la empresa constituirán la base del informe. Algunas empresas también ofrecen recomendaciones sobre su inventario, unidades vendidas y flujo de caja, entre otras áreas de su actividad financiera.
La popularidad de esta práctica se ha movido en altibajos. Después de que el Congreso de EE.UU. decidiera eximir de responsabilidad a las empresas por los comentarios sobre sus resultados futuros, la práctica de ofrecer orientaciones sobre los beneficios se extendió ampliamente en la segunda parte de la década de 1990. En los últimos tiempos, durante la volatilidad de la pandemia, muchas las han puesto en pausa.
Cuando se publican, los inversores suelen analizar las declaraciones de la dirección sobre las perspectivas futuras de la empresa para conocerla mejor. Mientras que la cuidadosa evaluación por parte de los analistas de los progresos de la empresa desde que se generó la última serie de datos, así como las expectativas para los próximos meses, pueden llevar a una revalorización del precio de las acciones.
Muchas decisiones de los inversores sobre si comprar, mantener o vender las acciones de una empresa se ven influidas por las calificaciones bursátiles de estos analistas. Por ejemplo, si la dirección de una empresa proporciona cifras orientativas que están muy por debajo de las expectativas del mercado, muchos analistas probablemente asignarían un valor inferior a las acciones, lo que animaría a muchos inversores a vender.
¿Por qué algunas empresas ya no la facilitan?
Algunos miembros de la comunidad financiera opinan que es más probable que las previsiones perjudiquen a una empresa y a sus accionistas que los ayuden. El conocido inversor Warren Buffett instó recientemente a las empresas a abandonar las previsiones de ganancias trimestrales. Según él, este sistema obliga a las empresas a anteponer los beneficios a corto plazo a la salud de la empresa a largo plazo. "Creo que es una muy mala práctica entrar en el juego de las previsiones de resultados, y es un juego". afirmó.
Muchas empresas también suspendieron sus políticas de previsiones en los últimos años, durante la pandemia. A lo largo de las primeras fases de respuesta a la crisis, el valor de los activos y las operaciones de las empresas fluctuaron salvajemente, haciendo prácticamente imposible hacer predicciones precisas de resultados para cualquier periodo de tiempo más allá de la semana siguiente.
Debido a la imprevisibilidad de muchos factores, muchas empresas dejaron de hacer pronósticos antes que arriesgarse a errar el tiro. Desde entonces, algunas de ellas no han vuelto a esta práctica o todavía no la han retomado ante la persistente incertidumbre económica mundial.
Resumen
Seguir de cerca las previsiones de las empresas es sólo una de las muchas herramientas en las que pueden confiar los inversores como parte de su investigación. Muchas grandes empresas las proporcionan, y otras muchas no.
Dado que, por lo general, se tiende a infravalorar los resultados para que las empresas superen las expectativas, los inversores siempre deben tomar estas previsiones con cautela.
Sin embargo, un ejemplo de un momento en el que hay que prestar atención a las previsiones es cuando las empresas promueven resultados futuros muy positivos. Las empresas siempre intentarán evitar incumplir sus previsiones de crecimiento, por lo que cabe suponer que una orientación positiva significa que hay motivos para confiar.
Debe considerar si comprende cómo funciona los CFDs y si puede asumir el alto riesgo de perder su dinero. La información proporcionada no supone ninguna investigación específica de inversión. El material no ha sido elaborado de acuerdo a los requisitos legales diseñados para promover la independencia de la investigación de inversión y, por lo tanto, debe considerar como una comunicación de marketing. El material proporcionado no está relacionado con ningún objetivo específico de inversión, situaciones financieras o necesidades de la persona específica que pueda recibirlo. El rendimiento pasado no es un indicador de rendimientos futuros. Por lo tanto, cualquier persona que tome una decisión basada en la información proporcionada, lo hace bajo su propia responsabilidad.El jueves, el euro cayó por debajo de la paridad y tocó el nivel más bajo en relación con el dólar desde diciembre de 2002.